16 marzo 2007

Reclutarte, antes de evaluarte y seleccionarte

Antes de examinar al candidato, los departamentos de Recursos Humanos deben encontrar al solicitante. Ahora esto resulta mucho más fácil. Hace diez años surgieron los portales de empleo: desde tu casa, vía Internet, puedes buscar empleo y ofertarte directamente, sin tener que dar un paso. Puedes enviar tu currículum directamente, e incluso suscribirte para recibir las ofertas de empleo que encajen con tu perfil, para así facilitarte aún más la búsqueda.

“La toma de referencias es un elemento de reclutamiento esencial. En Michael Page es obligatorio, teniendo en cuenta que queremos garantizar el máximo “estándar” de calidad a nuestros clientes”, afirma Ricardo Corominas, director de Michael Page Barcelona, empresa de reconocimiento mundial en la selección de mandos intermedios y directivos.

El 80% de las empresas recurre a las referencias en el proceso de selección. Michael Page Internacional constata que unas buenas referencias son decisivas para la selección de un candidato. Con las referencias, quien selecciona al candidato puede tener una idea más exacta de las cualidades y defectos reales al contrastarlo, además de poder detectar problemas de fiabilidad, honestidad o incompetencia graves. Desde su experiencia, Ricardo Corominas apunta que la solicitud de referencias puede ser un primer filtro en el proceso de selección.

Para obtener más veracidad se prefieren referenciantes objetivos, evitando que el candidato aporte nombres de sus amigos. No obstante, cada referencia -de las tres que se suelen pedir como media, según Michael Page International- tiene que estar autorizada por el candidato. En la toma de referencias se deben plantear qué relación mantenía con la persona a la que se le está pidiendo referencias, una definición de la persona tanto personal como profesional y, por último, las capacidades del candidato en relación con el puesto concreto al que postula.

De ahí la importancia de que cuides a tus mentores y de que te los consigas: profesores, empresarios, profesionales, directivos, investigadores y demás personas que gocen de una cierta credibilidad y prestigio, y que puedan recomendar tu candidatura a los puestos. Muchas veces vales, lo que valen tus valedores.

1 comentario:

Anónimo dijo...

corominas, colócanos a toos......