05 agosto 2008

¿Doctorado? ¿Para qué?

¡Menuda sugerencia loca! ¿Y me lo dices ahora, Pedro? ¿Sabes dónde me pillas? Al sol de la canícula, rodeado de amiguetes, tomando una cañita, a la brisa de la playa, sudando la camiseta, dorándome la epidermis… Vamos, que mejor me cuentas otro chiste.

–Pues esto es lo que hay, mi campeón: el doctorado. O sí, o sí. Tienes que zanjarlo: o ahora, o nunca. Las grandes decisiones, los mejores proyectos que marcan tu vida, son los que se anotan en una servilleta de cafetería. El mejor think tank queda bien sentado en una terracita, tomándote unos whiskyses… como ahora en agosto. Además, la preinscripción al doctorado se cierra en Septiembre. Si no te sacas el billete cuanto antes, se te escapa el tren. Los plazos son sagrados, en esta burocracia que nos corroe. Si se te pasa sólo un día, te cae del cielo un año más. Recuerda aquel “Vuelva usted mañana”, de Mariano José de Larra.

Bien. Estás más despierto. Podemos charlar. Te veo atento. Déjame que te coma la oreja un rato. Aquí te aporto unas cuantas buenas razones, para pensarte lo del doctorado. Enchufo la máquina. Va en cadena. Estos son los motivos. Marchando…

1. RESULTADOS. Lo más grave que te puede pasar, si es que lo empiezas, es que lo termines, y salgas doctor. Bien pensado, no es algo tan grave. Yo lo he hecho ya tres veces, y no me ha dolido tanto: llegas incluso hasta a cogerle el gustillo.

2. OPORTUNIDADES. Ahora, amigo, tú puedes. Mañana, sólo Dios sabe. Te pesarán más los años, andarás más liado, pensarás que ya no tienes edad y que te faltan bríos para meterte en esas guerras… estarás más quemado que la pipa de Sitting Bull. No se es joven siempre.

3. PLENITUD. Empezar, es de muchos; terminar, sólo de pocos. Pues uno de ellos puedes serlo tú. La carrera universitaria, sólo la culmina el doctorado. Es como el “The End” de las pelis, como Móstoles o Finisterre: llegados allí, ya no queda más.

4. CONVENIENCIA. Cobra más un licenciado, que un no titulado. Gana más sueldo un doctor, que un simple graduado. Eligen antes, al que más sabe, mejor que a uno cualquiera del montón.

5. DOCENCIA. Cuatro clasecitas bien dadas, a alto nivel superior, compatibles con tu horario profesional, te brindan un sobre sueldo chulísimo, que no es nada despreciable.

6. ESTRATEGIA. No hay que poner todos los huevos en la misma cesta. Si sólo apuestas por la empresa, tienes cubiertos menos flancos que si vales también para trabajar en lo académico.

7. VIDA FELIZ: del Pilar a San Isidro, que es lo que duran las clases; Febrero y Septiembre, libres para exámenes; Semana Santa y Navidad, para el ocio, y el resto PARA INVESTIGAR. Eso es vida universitaria. Sólo disfrutan mejor vidorria que los estudiantes, los profesores.

8. AUTOINVERSIÓN. Todo lo que hagas por la empresa, allá se queda. Por el contrario, nada de lo que pongas en tu formación doctoral, queda fuera de tu capacitación propia, de tu formación y de tu currículum. Tú te lo quedas.

9. ESPECIALIZACIÓN. La carrera enseña poco más de cuatro vaguedades abstrusas en los libros. Lo real, lo concreto, lo aplicado, lo cierto, los casos, vienen cuando te enfrentas a una realidad palpable. ¿Qué mejor concreción hay, que investigar con una tesis?

10. CATEGORÍA. Con todo, digan lo que digan, ‘Doctor’ es lo que aún más viste. Hasta lo confunden con médico, como si fuera lo mismo. El prestigio de tu Tesis, no te lo quita ni hacienda. Un Dr. antepuesto a tu nombre en tu tarjeta, viste más que un marquesado.

“Pues no debe ser todo tan bonito como tú lo pintas, Pedro, cuando casi nadie lo hace…”

–Respondo también a esas objeciones argumentadas, muy típicas y bien manidas, que sin duda me alegarás.

1. NO SIRVE DE NADA. –Menos aún sirve el no tenerlo. Estúdiate la estadística: porcentaje de doctores en paro, frente a porcentaje de licenciados trabajando de mangutas.

2. MUCHOS YA LO HICIERON, Y SE MUEREN DE HAMBRE. –Ser doctor, como ser ingeniero, no te implanta una vacuna contra el paro. El trabajo no te lo asegura la universidad, te lo buscas tú solo.

3. PREFIERO INGRESAR EN UN PRESIDIO, QUE VOLVERME A LAS AULAS. –Lo admito. Pero para sacarte el doctorado, no es imprescindible necesariamente tragarte más de lo mismo. Al menos, puedes organizártelo bastante mejor. Hablaremos.

4. SÓLO HAY ALGO PEOR QUE UN PROFESOR: dos profesores. ¿Hacerme yo doctor? ¿Pasarme yo de indio a ser vaquero? Eso supondría traicionar ahora a mis compañeros, convirtiéndome yo en otro profe.
–Pues sí, señor mío. Algún día habría de ser. Así es la vida. Nadie nace padre…

5. VAN A CERRAR LAS UNIVERSIDADES. –Tal vez. Pero mientras tanto, lo que sí te seguro que no cierran, es el desempleo. Además, en toda crisis, la gente aprovecha para estudiar más.

6. PIERDES TRES O CUATRO AÑOS DE VIDA PROFESIONAL. –Menos pérdidas, chico: que la vida es muy larga. No tengas tanta prisa por producir, que ahora nos morimos todos de muy viejos.

7. TE QUITA TIEMPO PARA PUJAR PROFESIONALMENTE. –¿Seguro? ¿Crees que lo único que se valora para llegar a Jefe, es los años que tenías cuando comenzaste a currar? No llega más arriba el que antes empieza, sino más bien el que mejor avanza.

8. NO SE PUEDE ESTAR A LA VEZ A DOS COSAS: TRABAJO Y TESIS. –Já. Ya lo creo que sí se puede. Yo me he defendido ya tres tesis doctorales, y nunca se me ha ocurrido dejar de trabajar para hacerlo. Es más: cuanto más pillado andas, más te espabilas y mejor rindes.

9. SIN ENCHUFE NO SE PUEDE LLEGAR A PROFESOR. –Tal vez. Pero si no te apellidas Borbón ni Zapatero, como nos pasa al 99’99% del censo, tendrás que ganarte tus contactos de otra manera, como todo hijo de vecino. Y si no eres ni siquiera doctor, qué quieres que te diga, lo llevas bastante crudo.

10. UNA TESIS ES UN ROLLO INÚTIL. –Es posible. Pero es lo único que te hace doctor. También la carrera es un mal parto, pero es el único acceso a Licenciado.

Vamos, en resumidas cuentas, que con tu tesis eres más, ganas más, puedes más, logras más, subes más, alcanzas más… siendo doctor, que si no lo eres.

En conclusión: dime qué razones poderosas (llamarte Rockefeller, ser sultán en el Golfo Pérsico, estar al mando de una multinacional…) te recomiendan abstenerte de ser doctor, por disponer de harto mejores inversiones para tu tiempo. Y si no las tienes, hazme caso, alístate cuanto antes, que Bolonia llega en breve, y esto pasa a ser un parto elefantino.

14 comentarios:

Anónimo dijo...

Ahora que todo son dudas en lo que respecta al incio del doctorado, artículos como éste se agradecen.

Anónimo dijo...

Buen artículo, gracias!

Mónica dijo...

Pedro, tienes más razón que un Santo!!!!

Gracias por preocuparte por todos, eres un crack!!!

Anónimo dijo...

Pues sí que se agradece, pero no hace si no crear otra duda más. Ahora que me había planteado el máster... qué hacer. Es necesaria la preparación pero a veces es cierto que quien mucho abarca poco aprieta...

Anónimo dijo...

Un doctorado no te abre más puertas, ni menos. Muchas empresas no cogen doctores/ingenieros porque hay que pagarles más. Pero yo quiero creer y espero (como futuro ingeniero en septiembre, espero) no tener que depender de si una empresa me coge o no, sino ser en un futuro quien decida quien viene a trabajar a MI empresa. Y sin un doctorado/ingenieria, lo tienes bastante complicado, sino te apellidas calatrava, zapatero...

Daniel Llamas, un alumno suyo.

Anónimo dijo...

Una pregunta...¿cuánto cuesta la matrícula de cada año de doctorado?

Anónimo dijo...

Siempre dando buenos consejos. Gracias Pedro, de todo corazón.

Anónimo dijo...

Gracias por todo!!! :-)

Anónimo dijo...

como casi-doctorando (estoy terminando ya la tesina, o practicum, o trabajo fin de master o como se llame), lógicamente le veo las ventajas al doctorado; en mi caso, mi motivación es, principalmente, que me apasiona investigar, escribir, llegar a conclusiones y avanzar en esto que parece una wikipedia pero que no lo es, y que se llama progreso intelectual y se basa, aunque parezca aburrido, en notas a pie de página y metodologías espartanas. Me gusta aprender. Sin embargo, también tengo ciertos temores. El primero de ellos es que, en mi profesión (periodismo), cada mes desaprovechado parece una oportunidad perdida y una avalancha más de becarios, licenciados o ambas cosas a la vez (tiene tela...) compitiendo en un mercado para el que la palabra "saturación" parece un eufemismo.
Pero bueno, you never know...
gracias anyway por estos consejos.

carlos primo (ex alumno)

Anónimo dijo...

Realmente muy interesante el artículo.
Aún me quedan unos dos años de carrera pero mi intención es sacarme el doctorado.
El artículo es una razón más para mi motivación!

Anónimo dijo...

Muchas gracias por tu artículo, estoy estudiando el grado Master por que estoy en paro, y valorando la opción de Doctorarme, aún no tengo mucha información, y realmente me ha servido más tu artículo que las vagas impresiones obtenidas de la Universidad, hay un secretismo al respecto que no entiendo... Lo dicho muchas gracias crack, anímate a sacarte un cuarto doctorado!!! XD

felipao dijo...

Gracias, ahora desempleado haciendo MBA y planeando definitivamente ir a por el Doctorado. Gracias por tus argumentaciones!

Anónimo dijo...

Ahora mismo me he decidido por hacer mi doctorado, sin duda, el tiempo no perdona ni un sólo día y quien no toma las oportunidades en el momento, ya no se volverán a presentar en las mismas condiciones. Gracias Pedro, ahora estoy seguro que es esto lo que me falta para llegar al "THE END". Felicidades por tu artículo y consejos. Lo tomo todos porque vienen de alguien con una gran preparación profesional y experiencia. Saludos desde Puebla, México. Salvador Momox.

Anónimo dijo...

Ahora mismo me he decidido por hacer mi doctorado, sin duda, el tiempo no perdona ni un sólo día y quien no toma las oportunidades en el momento, ya no se volverán a presentar en las mismas condiciones. Gracias Pedro, ahora estoy seguro que es esto lo que me falta para llegar al "THE END". Felicidades por tu artículo y consejos. Los tomo todos porque vienen de alguien con una gran preparación profesional y experiencia. Saludos desde Puebla, México. Salvador Momox.