29 mayo 2012

¿A dónde vamos?

Escribe Alberto López Marín (@alopezmarin) en Punto de Encuentro Complutense

¿Qué pasa? Que no cabemos. La maquinaria universitaria produce periodistas sin parar, mientras el mercado los escupe sin compasión. España tiene cerca de 40 facultades de Comunicación que suman anualmente más de 2.500 aspirantes a un empleo: 6.200 licenciados en paro desde el comienzo de la crisis, 1.400 sólo este 2012 y subiendo.

¿Periodismo? No hay tiempo ni para levantar el teléfono, ni para acudir al lugar de los hechos, se desvanecen las corresponsalías, el tiempo apremia y no hay opción de cuidar el lenguaje y mucho menos para contrastar, Twitter es fuente inagotable de éxito, el rumor es rentable, la declaración política o nota de prensa es oro puro…

¿Efecto? Un Periodismo pequeño, facilón y vacío. Pero ilógico. Que estemos menos, no implica que tengamos que hacerlo peor. No tiene justificación –salvo monetaria– ofrecer las mismas páginas, suplementos y especiales que antes del batacazo, teniendo ahora hasta un centenar menos de redactores.

¿Clave? Para ser leal a la audiencia y al oficio mismo, hay que fijar prioridades y ofertar contenidos acordes al tamaño de la redacción y a sus capacidades. Ofrecer lo original, mejor que lo común.

¿Motivo? Está en juego la utilidad y grandeza de lo que hacemos, que seamos tomados en serio y respetados. El Periodismo perdonará los despidos si las cuentas obligan y si se han agotado todas las alternativas, pero no que se ambicione trabajar a toda máquina como si nada hubiera pasado.

No hay comentarios: